Mi papá tiene el sol en Sagitario. ¿Quién alguna vez escuchó a alguien decir “Qué rompe huè son los sagitarianos” o “Sagitario es uno de los peores signos”? Obvio que nadie.
Sí, son excesivos, pero son tambien divertidos, aventureros, generosos y con un profundo sentido de la trascendencia. Son personas con las que da gusto estar.
Creo que la mejor cualidad de Sagitario es su enorme capacidad de ver un futuro brillante incluso en los días más oscuros y vivir para ello.
Tengo el Sol en tierra y ningun planeta en fuego: soy demasiado racional y emocional, es vital para mí tener a sagitarianas y sagitarianos cerca para que me inyecten un poco de su fe irracional y movemontañas.
Funciona, especialmente cuando se combina con un buen plan y estrategia. Pero qué pasa cuando no hay plan que valga ? a veces, no queda más que desesperación, al menos para los signos de agua y de tierra. Y ahí es cuando un Sagitario se vuelve vital. Nos dicen: “¿Ves esos dos picos? Ahí está Chile, ¿lo ves?” No, no se ve un carajo, no se ve nada piensa Roberto y el resto de los mortales, pero al instante de ver esa escena de “La sociedad de la nieve” supe que Nando Parrado era Sagitario.
La mente concreta no ve absolutamente nada. Pero ellos sí. Los sagitarianos y sagitarianas lo ven.
Un Capricornio te llevará a la cima de la montaña con su ambición y su capacidad de planificación. Pero cuando se trata de asuntos trascendentales, cuando un grupo de personas, una sociedad o un equipo necesita elevar su conciencia y su capacidad espiritual, Capricornio es demasiado lógico. En esos momentos de oscuridad extrema, necesitas un salto de fe .
Sagitario es la trascendencia de los límites. “No es solo viajar”. Es la capacidad de trascender las limitaciones de la materia y la mente a través del espíritu.
Hay una anécdota que ilustra la energía de Sagitario en general y el mayor poder de mi papá en particular:
Cuando el servicio militar era obligatorio en Argentina, mi papá, como la mayoría de los jóvenes en esos días, estaba obligado a pasar un año entero con los militares durante la dictadura. De alguna manera, logró rescatar algunas anécdotas graciosas o heroicas, aunque la experiencia real fue “bastante dura”, por mantener un tono sagitariano.
Me contó muchas veces que los lunes, a eso de las 5 AM, mientras se afeitaba y preparaba para volver “al servicio”, el programa de radio que escuchaba abría cada emisión con “Everybody Loves Somebody” de Dean Martin, de alguna manera la esencia encriptada en esa canción era su combustible para sobrepasar esos días horribles que estaban por delante.
Hace un año, me tocó ser nuevamente su copiloto. Con 63 años, era su primera vez manejando en Napoli, y si podés manejar en Napoli, you can make it anywhere. Lejos de no gustarle la experiencia, me dijo:
“Sabés, prefiero este caos al de Buenos Aires porque de alguna manera es organizado. Hay fluidez, muy pocos semáforos, así que tenés que entender intuitivamente el flujo de la ciudad. Una vez que lo entendés, no perdés tu vida atascado en embotellamientos. Es caótico y loco, pero está en constante movimiento.”
Una metáfora de fuego sagitariano.
Yo, Tauro, prefiero contemplar la vida meditando bajo un árbol como Diógenes asi que demas esta aclarar que fue la primera vez y la ultima vez que alquilo un auto en Napoli, no obstante entiendo completamente la lógica detrás de lo que me dijo.
Estaba tan traumatizada por la locura de la situación que no lo habia registrado, pero es verdad, el trafico de napoli es orgánico, fluido, y al mismo tiempo inquietante y adrenalinico. muchas veces te encontras preguntándote: “¿Cómo carajo hicimos eso? Fue una locura, podria haber salido muy mal”… pero no, salió bien, y estás vivo.
Eso es Sagitario. Y eso también es mi papá.